Mi abuela me contó, que estando ella pequeña,
tomaba frutos de cualquier vereda
los frutos no tenían dueño,
ni los espacios ni la leña.
El aire era rico y puro
y los rios, de agua fresca,
agua que todas las tardes
mojaba su piel, de niña inquieta.
Mi abuela me contó tantas historias buenas,
que ella feliz disfrutaba.
mi abuela vivió en esta tierra
llena de gente, bonita y buena.
Mi abuela me contó que entre el pueblo odio, nunca existió
que todos eran amigos,
aunque de distintos partidos,
siempre habiá una mano que daba un apretón.
Mi abuela me contó que de aquellos tiempos nada queda,
que nunca la vivió, ni quiere vivir en guerra.
Que su padre le contaban , las tristezas de sus guerra,
ella solo asustada escuchaba
a su padre, que de lejanas tierras era,
ella tan solo una niña, ella que solo una india era.
Y con todas esas historias,
que mi abuela aun recuerda,con tristeza ,
ella me dice, que de esos momentos de historia,
ya a nosotros, ni la sombra nos queda.
Que ahora siendo hermanos, el odio y rencor impera,
Mi abuela ahora me cuenta que del amor nada queda.
No hay comentarios:
Publicar un comentario